Parece que lo estoy viendo. Hermoso.

Guapa estampa insólita.

En la Asturias lluviosa de este verano, es una estampa inefable. Gracias por comentar

El faro que persiste en su semoviente luz contra la estática grisura... Gracias.

Ese batir de alas refresca un poco el estiaje levantino.
Gracias, Fernando.

Ese ínfimo momento en que la hormiga se detiene ante la grieta, justo antes de reconducir -que lo hará- su trayectoria... en ese minúsculo -mayúsculo para la hormiga- mundo vegetal donde crece el trébol... Gracias.

Oye, pues me gusta tu variante. La umbría ya sugiere el bosque. Tomo nota, gracias.

¡Cuántas veces me ha asombrado (nunca mejor dicho) el vuelo nocturno zigzagueante de los murciélagos! Y en una noche sin luna... ¡especial! Gracias, Fernando, por el regalo.