Matsuo Bashö
Matsuo Bashö
Estoy en Kyoto
cuando canta el cucú
soñando con Kyoto.
A veces los clásicos desconciertan. Muchas veces he oído hablar de la importancia de que el poeta no esté presente en el haiku. Pero en este se observa no sólo la presencia de Matsuo en el haiku que escribe, sino su total fusión con la naturaleza, que personifica. Este haiku me resulta tierno e ingenioso a la vez, con una pizca de humor.
También me ha hecho sonreír este otro haiku del mismo autor, cuando pienso en las actuales alergias primaverales.
El ruido de alguien
sonándose la nariz
ciruelo en flor.
Me encanta como de algo tan cotidiano e incluso poco poético hace Batsuo que florezca un árbol.
Finalmente os quería comentar una anécdota de este autor. Probablemente la conozcáis, pero no me resisto a copiarla del libro de F. P. Izquierdo, El Haiku Japonés
"Cierto día, Basho y Kikaku iban paseando por el campo y se quedaron mirando las libélulas que revoloteaban por el aire. En ese momento, el discípulo compuso este haiku:
¡Libélulas rojas!
Quítales las alas
y serán vainas de pimienta
El Maestro respondió: "No. De este modo has matado a las libélulas. Di más bien:
¡Vainas de pimienta!
Áñadeles alas
y serán libélulas!"
cuando canta el cucú
soñando con Kyoto.
A veces los clásicos desconciertan. Muchas veces he oído hablar de la importancia de que el poeta no esté presente en el haiku. Pero en este se observa no sólo la presencia de Matsuo en el haiku que escribe, sino su total fusión con la naturaleza, que personifica. Este haiku me resulta tierno e ingenioso a la vez, con una pizca de humor.
También me ha hecho sonreír este otro haiku del mismo autor, cuando pienso en las actuales alergias primaverales.
El ruido de alguien
sonándose la nariz
ciruelo en flor.
Me encanta como de algo tan cotidiano e incluso poco poético hace Batsuo que florezca un árbol.
Finalmente os quería comentar una anécdota de este autor. Probablemente la conozcáis, pero no me resisto a copiarla del libro de F. P. Izquierdo, El Haiku Japonés
"Cierto día, Basho y Kikaku iban paseando por el campo y se quedaron mirando las libélulas que revoloteaban por el aire. En ese momento, el discípulo compuso este haiku:
¡Libélulas rojas!
Quítales las alas
y serán vainas de pimienta
El Maestro respondió: "No. De este modo has matado a las libélulas. Di más bien:
¡Vainas de pimienta!
Áñadeles alas
y serán libélulas!"
aciertas
hola Marian
con estos comentarios aciertas, me llega el mensaje y se llena mi corazón. todavía conozco muy poco de este arte, pero con mensajes como el tuyo empiezo a entender
gracias!
xavierico
con estos comentarios aciertas, me llega el mensaje y se llena mi corazón. todavía conozco muy poco de este arte, pero con mensajes como el tuyo empiezo a entender
gracias!
xavierico
Marian, mi dulce Marian, has entrado y yo no estaba qulí para saludarte. Gordi, todos hemos leído por poco que haya sido poemas clásicos con personificaciones, metáforas e inclusión del autor en el texto.
Pero los primeros pasos, nos proponen que nos ajustemos a las reglas, no me parece del todo mal, una vez adquirida la técnica, volaremos como halcones, cóndores aquí !
Te quiero y te extraño, ya lo sabes, porque a menudo te lo menciono. Recibe mis besossssssssss, crea y cuídate.
Pero los primeros pasos, nos proponen que nos ajustemos a las reglas, no me parece del todo mal, una vez adquirida la técnica, volaremos como halcones, cóndores aquí !
Te quiero y te extraño, ya lo sabes, porque a menudo te lo menciono. Recibe mis besossssssssss, crea y cuídate.
Disculpad que no esté de acuerdo con lo expuesto hasta aquí. Quizá se entienda mejor y me ahorre el discurso, dejar este otro enlace que habla justamente de ese persistente equívoco con el haiku japonés (donde la producción es abrumadoramente exorbitante comparada con la de occidente). La Historia del Haiku está repleta de desviaciones y experimentos, máxime cuando el País del Sol Naciente es un pueblo que se ha caracterizado por su tendencia a importar lo de fuera y a japonizarlo.
http://blogs.periodistadigital.com/elal ... z#comments
Yo me quedo con esto
Saludos
http://blogs.periodistadigital.com/elal ... z#comments
Yo me quedo con esto
porque de la poesía occidental ya se sabe a dónde ha llegado.No sabemos a qué habría llegado el haiku de seguir la vía de la fabricación de figuras literarias que inauguró Onitsura ni para qué serviría entonces.
Saludos
Hola Barlo, Mirta y demás:
Gracias por vuestros comentarios.
Barlo, eres un gran polemista y me gusta mucho tu exigencia en la escritura del haiku. Hace unos días leí este haiku y me reí de buena gana pensando en las numerosas discusiones que tienen lugar en este foro. Copio el texto:
La escuela de la alondra
y la de la rana
discuten sobre el canto
Shiki
Creo que lo que hay que hacer es intentar escribir lo mejor que podamos dentro de las normas que establece el haiku, y si en algún caso nos salimos un poco, lo importante es aprender y disfrutar de nuestro canto (siempre que no desentone)
Te mando un saludo muy especial a ti y otro para Mirta.
Estoy muy liada laboralmente y a penas saco tiempo para conectarme a este rincón, pero me acuerdo de vosotros mucho.
Gracias por vuestros comentarios.
Barlo, eres un gran polemista y me gusta mucho tu exigencia en la escritura del haiku. Hace unos días leí este haiku y me reí de buena gana pensando en las numerosas discusiones que tienen lugar en este foro. Copio el texto:
La escuela de la alondra
y la de la rana
discuten sobre el canto
Shiki
Creo que lo que hay que hacer es intentar escribir lo mejor que podamos dentro de las normas que establece el haiku, y si en algún caso nos salimos un poco, lo importante es aprender y disfrutar de nuestro canto (siempre que no desentone)
Te mando un saludo muy especial a ti y otro para Mirta.
Estoy muy liada laboralmente y a penas saco tiempo para conectarme a este rincón, pero me acuerdo de vosotros mucho.
Interrogaría
sobre el haiku chino
a esta mariposa que vuela.
Matsuo Bashö
sobre el haiku chino
a esta mariposa que vuela.
Matsuo Bashö
Sólo un detalle:
Igual que Lorca no hizo sólo posía, se considera que el gran Basho consiguió no más de 100 haiku relmente de calidad.
Sin embargo por ejemplo, Buson, son casi incontables.
Digo esto porque no algo porque sea clásico y venga del Japón necesariamente lleva el marchamo de Haiku.
Un abrazote
Igual que Lorca no hizo sólo posía, se considera que el gran Basho consiguió no más de 100 haiku relmente de calidad.
Sin embargo por ejemplo, Buson, son casi incontables.
Digo esto porque no algo porque sea clásico y venga del Japón necesariamente lleva el marchamo de Haiku.
Un abrazote
Marian: aunque sinceramente no sé cómo tomar tu declaración de "gran polemista", no obstante te doy las gracias por captar esa exigencia respecto al haiku que también mencionas.
Si lo de "polemista" lo vienes a decir por cosas como esta u otras del mismo tenor...
http://paseos.net/modules.php?name=Foru ... highlight=
pues creo que como que entiendes que hay que partir de un modo un tanto esquemático para que el taller no se convierta en cualquier otra cosa ajena al haiku. (Criticable, sí, pero no es este el lugar para ponerse a editar tercetos o si se prefiere, haikus de estilo poético y subjetivos, o líricos o románticos o como vosotr@s prefiráis). Si se permitiera todo eso, este espacio creado por nuestro webmaster grego, dejaría de ser lo que se propuso que fuera: un paseo por el estrecho sendero del haiku. Nadie aquí desprecia el poema corto y lírico por subjetivo y metafórico; sino que tratamos de explorar otra vía del lenguaje; pero eminentemente vía de los sentidos y no (o no tanto) del intelecto. No sé por qué resulta tan polémico entenderlo. Máxime cuando se dice siempre que a nadie se le obliga a escribir el haiku; que se puede uno decantar por la canción waka o el tanka que son más permisivos con la subjetividad y las figuras literarias, etc. No sé por qué empeñarse en introducir todo eso dentro de un espacio tan depurado como es el haiku.
Y ya que hablabas de cantos de rana y alondras, me despido con el ya mencionado haiku de Ampû
Así es la alondra:
una voz que cae en picado
y, cuando la busco, nada
Así es al parecer también el haiku, y cuando nos empeñamos en buscarlo...
Salud
Si lo de "polemista" lo vienes a decir por cosas como esta u otras del mismo tenor...
http://paseos.net/modules.php?name=Foru ... highlight=
pues creo que como que entiendes que hay que partir de un modo un tanto esquemático para que el taller no se convierta en cualquier otra cosa ajena al haiku. (Criticable, sí, pero no es este el lugar para ponerse a editar tercetos o si se prefiere, haikus de estilo poético y subjetivos, o líricos o románticos o como vosotr@s prefiráis). Si se permitiera todo eso, este espacio creado por nuestro webmaster grego, dejaría de ser lo que se propuso que fuera: un paseo por el estrecho sendero del haiku. Nadie aquí desprecia el poema corto y lírico por subjetivo y metafórico; sino que tratamos de explorar otra vía del lenguaje; pero eminentemente vía de los sentidos y no (o no tanto) del intelecto. No sé por qué resulta tan polémico entenderlo. Máxime cuando se dice siempre que a nadie se le obliga a escribir el haiku; que se puede uno decantar por la canción waka o el tanka que son más permisivos con la subjetividad y las figuras literarias, etc. No sé por qué empeñarse en introducir todo eso dentro de un espacio tan depurado como es el haiku.
Y ya que hablabas de cantos de rana y alondras, me despido con el ya mencionado haiku de Ampû
Así es la alondra:
una voz que cae en picado
y, cuando la busco, nada
Así es al parecer también el haiku, y cuando nos empeñamos en buscarlo...
Salud
Re: Matsuo Bashö
Esta mañana he leído vuestros comentarios. ¡Rebueno! ...se abre mi mente...disfruta mi corazón y "yo" quiero seguir por este camino de haykus.
Un abrazo a todos!
Surry
Un abrazo a todos!
Surry
Re: Matsuo Bashö
Lo que es fundamental es que nos demos cuenta de que en la poesía haiku lo que importa es lo que está fuera del hombre y no lo que sucede dentro. No interesa lo que evoca en el poeta un instante del mundo natural tanto como una fiel reproducción del mismo. El poeta es necesario, porque es el que capta el momento del desenvolverse del mundo y lo plasma en su obra de arte. Pero el instrumento no puede transformarse en el objeto de su trabajo. El lápiz no debe escribir sobre el lápiz. De lo contrario, seremos condenados a decirnos perpetuamente a nosotros mismos, a hablar de nuestros sentimientos, de que estamos amando o somos abandonados por los que queremos. Si no sabemos acallar nuestro mundo iterior permaneceremos ajenos a la realidad que nos circunda, con sólo conexiones eventuales con el mundo y-por consiguiente- completamente poco significativas, como el enfermo mental que ve una película y apenas puede encontrar una lógica en la misma porque no ha podido dejar de mezclar las escenas que ha visto con otras escenas que la película evocó en su mente. Desde el punto de vista del haiku, los occidentales somos enfermos mentales que no podemos atender al mundo. Nuestra realidad psicologica compleja nos hace necesariamente desatender lo que está sucediendo a nuestro alrededor. Porque cualquier sensación exterior reverbera en nuestro interior y solivianta recuerdos, anhelos, miedos, frustraciones... de modo que lo evocado por lo que hemos percibido hace unos instantes nos ha distraído durante un lapso de tiempo y al final ha terminado confundiéndose con lo que acabamos de percibir. Es como si, tocando el piano, los occidentales tuviéramos siempre pisando el pedal de la reduplicación de sonidos, concebido sólo para alargar un silencio final. Sabemos que el interior del hombre es una caja de resonancia. La educación japonesa trata de acolchar nuestro interior, de no dejar que se nos desarrolle un mundo psicológico complejo que nos aparte de la sensación directa y continua de nuestro exterior. En Japón el "yo" del hombre es aquello con lo que se percibe el mundo, mientras que para nosotros el "yo" es todo ese mundo psicológico sutil que se ha ido generando en nuestro interior. En Japón el "yo" es la unificación de los sentidos corporales, y en Occidente el "yo" es eso que se ha definido en nosotros frente al mundo.
El espacio interior del haiku, Vicente Haya. Ediciones Shinden (2004)
El espacio interior del haiku, Vicente Haya. Ediciones Shinden (2004)
Todos conocen el Camino; pocos lo recorren
- Gorka Arellano
- paseante haijin
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- Registrado: 25 May 2012, 08:27
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Re: Matsuo Bashö
Muy interesante y muy a tener en cuenta a la hora de componer un haiku... Gracias Barlo!Barlo escribió:Lo que es fundamental es que nos demos cuenta de que en la poesía haiku lo que importa es lo que está fuera del hombre y no lo que sucede dentro. No interesa lo que evoca en el poeta un instante del mundo natural tanto como una fiel reproducción del mismo. El poeta es necesario, porque es el que capta el momento del desenvolverse del mundo y lo plasma en su obra de arte. Pero el instrumento no puede transformarse en el objeto de su trabajo. El lápiz no debe escribir sobre el lápiz. De lo contrario, seremos condenados a decirnos perpetuamente a nosotros mismos, a hablar de nuestros sentimientos, de que estamos amando o somos abandonados por los que queremos. Si no sabemos acallar nuestro mundo iterior permaneceremos ajenos a la realidad que nos circunda, con sólo conexiones eventuales con el mundo y-por consiguiente- completamente poco significativas, como el enfermo mental que ve una película y apenas puede encontrar una lógica en la misma porque no ha podido dejar de mezclar las escenas que ha visto con otras escenas que la película evocó en su mente. Desde el punto de vista del haiku, los occidentales somos enfermos mentales que no podemos atender al mundo. Nuestra realidad psicologica compleja nos hace necesariamente desatender lo que está sucediendo a nuestro alrededor. Porque cualquier sensación exterior reverbera en nuestro interior y solivianta recuerdos, anhelos, miedos, frustraciones... de modo que lo evocado por lo que hemos percibido hace unos instantes nos ha distraído durante un lapso de tiempo y al final ha terminado confundiéndose con lo que acabamos de percibir. Es como si, tocando el piano, los occidentales tuviéramos siempre pisando el pedal de la reduplicación de sonidos, concebido sólo para alargar un silencio final. Sabemos que el interior del hombre es una caja de resonancia. La educación japonesa trata de acolchar nuestro interior, de no dejar que se nos desarrolle un mundo psicológico complejo que nos aparte de la sensación directa y continua de nuestro exterior. En Japón el "yo" del hombre es aquello con lo que se percibe el mundo, mientras que para nosotros el "yo" es todo ese mundo psicológico sutil que se ha ido generando en nuestro interior. En Japón el "yo" es la unificación de los sentidos corporales, y en Occidente el "yo" es eso que se ha definido en nosotros frente al mundo.
El espacio interior del haiku, Vicente Haya. Ediciones Shinden (2004)
"No es el universo el que necesita mejora, sino su modo de mirar."
Nisargadatta
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