Sobre la arena,
las huellas de las aves
de pronto cesan.
En los estantes,
los polvorientos libros
de un tal Cervantes.
La marihuana
creciendo en las macetas
de tu ventana.
Baja al estanque
-que las hiedras escalan-
un blanco ánade.
La caracola
susurrando secretos
de mares y olas.
¡Cinco!
Re: ¡Cinco!
está gracioso lo de ¡cinco! bien, orlandosantana, ese primer haiku está muy logrado. Combina tierra y aire mediado por esas huellas que también, a mí por lo menos, me conducen hasta la humedad de una playa..., pero ahí está la gracia, que podría ser en la arena de un parque público, en la arena de una plaza de toros, cualquier lugar donde haya tierra...; con final abierto y sugerente: ¿qué hizo levantar el vuelo a esas aves...?orlandosantana escribió:Sobre la arena,
las huellas de las aves
de pronto cesan.
Salud